sábado, 21 de marzo de 2015

En mi Día Internacional de la Poesía.












NUNCA nosotros

Vos y yo y los otros,
Los muertos en vida, los resurrectos,
Los desesperanzados que sueñan
Una apagada y gris nostalgia.
Vos y yo y los otros,
Los desmesuradamente vacíos de cielo,
De luz,
De nubes,
De luna,
Los que derriban puentes y pasos,
Los que apagan las luces para no verse,
Los que construyen paredes y cárceles.

Esos otros:
Muertos en vida,
Buscando una estrella azul en la ventana,
Una flor que nace en la mañana,
Buscando sin excusas,
Algo que no muera con el perfume de las rosas.

Y vos:
Inconcluso en,
Encontrando ausencia de paisaje,
Llegando, llenando, navegando…
Cadena de breves encuentro furtivos
En la noche del ser abandonado.

Y yo:
Persiguiendo sueños y colores,
Viviendo una palabra de fe en los andamios,
Recogiendo los cristales rotos del pasado…
Inconcluso ser abandonado
En la noche ausente de paisaje.

Y vos
Y yo:
NUNCA NOSOTROS



Hasta que la muerte nos separe

Esta es mi piel,
Este el camino que te ofrezco recorrer hasta la aurora,
Porque a ti,
A mí,
Nos sobran lazos para amarnos,
Para siempre:
Hasta que la muerte nos separe.

Esta es mi vida,
Esta la dicha de contemplar tu nocturnidad más profunda,
Porque de ti,
De mí,
Varias razones para eternizar
Mis manos más tus manos:
Hasta que la muerte nos separe.

Este es mi palabra,
Esta la gloria que no se firma jamás en los papeles:
Te amo y digo sí todos los días…
Hasta que la muerte nos separe.


Puertas

Silencio puertas muros laberintos
Salir y entrar en ellos
Dejarme ver dejarte verme
Sentirte adivinarme
leerme entre tus líneas
Líneas paralelas y vos así de cerca
entre las líneas tan lejos
cada vez mirarte sonreír
por algo que ni vos mismo entendés
Entendés poco o nada

Darte darme cuenta
sospechar por tu sonrisa
mi sonrisa de lado
inequívoca
acercarme acercarte sentirte en mi piel
adivinada y adivinarme en tu aliento
que dibujo que presiento
aquí en mis labios tus labios
sin espacio más y tiemblo
Tiemblo en tu silencio
Tiemblo en tu mirada
Tiemblo en tu presencia
Tiemblo sin más sin ti sin mi
Sin nosotros
Un nosotros que no existe
Desencadena cadenas de antaño
Abre esas puertas
Tira esos muros
Descubre laberintos
Me aleja cada día que muere
Me acerca cada día que nace

Que vuelvo
Solo para mirarte mirarme en tu mirada
Solo para reflejarme en tu sonrisa



Desatar palabras solo porque sí.
Decir cosas que normalmente no digo
y escribir así de rápido
y sin pensar como usté lo hace.
No quiero pensar mientras escribo esto,
solo dejar que las palabras salgan de mis dedos,
atropelladas, desbocadas;
así como me siento a veces.

De hacer las cosas que quiero y no,
que las palabras salgan y lo digan.
Que digan: soy así y no de la manera que quisiera.

Esta no soy yo.
Les digo.
Nadie sabe quién soy,
ni siquiera mi sombra.
Mi sombra a medias también,
escondida también,
preguntándose también
por qué los viernes son malos
y a veces los lunes no.

Quiero regresar a decir lo que no dije,
a hacer lo que no hice,
a repetir todos los días la historia
y encontrale todos los días miles de continuaciones posibles,
miles de guiones
y respuestas
y lugares
y frases hechas.

Solo para creer que así pudo haber sido.

Cuando usté escribe
me dan ganas de ser como usté,
tener su edad,
su tiempo,
su futuro,
sus posibilidades,
su ventana con vista al infinito...



No quiero casarme con vos
ni que te cases conmigo

Prometo no enamorarme
ni permitir que te enamores de mi,
no voy a contestarte cuando me llames
y yo tampoco voy a hacer llamadas

No quiero que me des regalos
ni que celebremos juntos el 14 de febrero
mucho menos pasar las navidades
aburriéndonos juntos
tomando vino
para olvidar que nos aburrimos

No quiero casarme con vos
ni que te cases conmigo,

aquí queda escrito para siempre
para acordarnos mañana
que te lo había prometido.


Esperar
Esperar toda una vida.
Y cuando digo vida no me refiero a vivir
como respirar o ver o sentir o simplemente ser
me refiero a vida como eso que se esconde
en las esquinas de las canciones o los poemas
o en los reflejos de una mirada sobre otra
o en los blancos de los grices o azules.
esperar toda una vida, digo
por la noche plagada e invadida de estrellas
por las risas y el agua y la espuma
esperar toda una vida por la mirada
por la sonrisa que se resiste a salir
por la sonrisa que lucha, por la sonrisa
que se desata como gota de agua sobre el agua.
esperar como quien espera la utopía,
esperar en silencio y entre sombras...
Esperar por mirarte y que me mirés de regreso
por la arena revuelta, los pensamientos revueltos
los brazos, las piernas y las lenguas revueltas.

Esperar por el abrazo y las risas.
Esperar.
Porque no quedaba más que eso.
Esperar y allí estás.
Como un oasis.
Un hechizo.


Te quiero dar el mar.

Te quiero dar el mar y no.
Su silencio interminable.
Su lengua de espuma
precipitándose en la arena.
Las huellas quedando
irremediablemente perdidas
para siempre...
Su olor incalculable de historias
que han ido callando sus pasados.
Te quiero dar el mar y no.
Sus nubes aburridas de tanto verano.
Sus lluvias cansadas de ser tan grices.
Sus cielos dramáticos y ciegos
gritando tanto amanecer
que nadie quiso ver.
Quiero darte el mar.
Y no.
Sus caracoles diminutos
dejando un rastro en la playa,
sus pájaros volando y pasando de largo,
tan largo y sin vernos, tan lejos su vuelo,
tan profundo su aliento, tan lejano y fugaz.
Osado y pretérito.
Siempre pasando, el mar.
Y no, quedando en calma.
En silencio. Callado.
Te quiero dar el mar y no.
No puedo.


Morir

Morir queriendo
morir de querencia de quereres y cariños
morir de la curiosidad
de saber que es lo que pensás
lo que sentís, lo que comés, lo que respirás
morir de sueño
del sueño profundo, del sueño de todos los días
del sueño que estuvieras siempre mirándome
y mirándote hasta que todas las luces se apaguen
y empieze un día nuevo
morir de hambre
morir de envidia
porque sí, porque me nace de muy adentro
morir porque los principios se acaban
y los finales siempre llegan
morir de finales largos y clavados como puñales
de finales esperados e inesperados
de finales como vidrios que se quiebran
de finales sonoros y aparatosos
de finales en silencio, finales como plumas que caen

Morir porque no queda otra forma de vivir,
morir como hecho inesperado
morir de hambre
morir de lo mismo de siempre
morir de lo que dice la gente
morir al respirarte
morir cuando no te respiro
morir de ti y de mi
enhebrando juntos una historia
sin horizonte conocido
con un paisaje lejano
que se le aleja y se aleja

y se aleja

morir porque te tengo y no
morir porque te escapás
morir como un refugio
morir como un estigma
morir porque se me acaba el aire.

Morir porque se me acaban las palabras
los minutos, las sonrisas y los días
morir como un simulacro
morir de verdades y de mentiras

Morir de canciones y poemas
de todas la letras que en su momento tuvieron sentido
de todas las letras que fueron, vinieron y no son
morir de la risa que reís junto a mí

morir como si nada
morir de ya no me queda más que decir

morir

simplemente morir

morir y morirte

morir deshauciada

morir